A mis seguidores...

Hace más de siete años que estoy en este mundo del blog y de las redes sociales, y a lo largo de todo este tiempo me han escrito y me escriben todo tipo de personas: Los más numerosos son los que descubren mi blog, o algunas de mis redes sociales, y sienten que se les cae la venda de miedo e ignorancia que les tapaba por completo los sentidos, dando lugar a una mirada de esperanza y comprensión. Son, principalmente, los que hace poco que acaban de ser diagnosticados. Hay otros que se asombran de que se pueda seguir teniendo una vida, una buena calidad de vida, con una enfermedad crónica como la nuestra, con sus épocas malas, regulares y mejores. No lo entienden, y aunque intento con mis palabras que lo comprendan, es muy díficil transmitirles, a través de la red, la energía y la esperanza necesaria. Estas personas, que son las menos, necesitan otro tipo de ayuda, la profesional, y ahí poco puedo hacer yo. Muchos seguidores son, al igual que yo, pacientes expertos y llevan tam